Semáforos intermitentes, confusos y peligrosos
En el anterior post decía que los semáforos intermitentes delante de pasos de peatones deberían indicar siempre la prioridad de paso de quien va caminando y no confundir indicando unas veces una cosa y otra lo contrario.
En Salamanca, nos hemos acostumbrado a que, cuando vamos conduciendo un coche y llegamos a un semáforo intermitente tenemos que mirar qué se indica a los peatones:
- si está en verde para ellos o no tiene señal alguna hay que parar
- si la señal de los peatones está en rojo hay que seguir.
La gente que viene de fuera se vuelve loca con esta señalización confusa y contradictoria. Paran, en todos los casos, con buen criterio, y quienes van detrás les tocan el claxon para que continúen circulando.
El Reglamento General de Circulación (Art. 146, d) dice que una luz amarilla intermitente obliga a los conductores a extremar la precaución y, en su caso, a ceder el paso, lo cual significa que el conductor del vehículo debe parar en todos los casos. En otras palabras, con estos semáforos la prioridad es siempre para los peatones.
Deberían eliminarse o corregirse todos los semáforos intermitentes que intenten transmitir otros mensajes, y los hay a decenas en Salamanca. Ejemplo: a la salida de la rotonda situada en el cruce de la Avda Portugal con Paseo de la Estación. Los pasos de peatones en dirección de salida de la rotonda (cuando están intermitente para vehículos y verde para peatones) son peligrosísimos para los peatones. Caso contrario: Las rotondas situadas en la Avda de Salamanca (Carrefour, Ctra. de Toro o de Valladolid).
Por otra parte, un semáforo intermitente en la entrada de una rotonda tiene el mismo efecto que una señal de ceda el paso (cuando todo el mundo haya interiorizado que quienes circulan por las rotondas tienen prioridad, con pintar un triángulo de peligro en el suelo sería suficiente). Tanto semáforo que sólo indica precaución es contraproducente, porque la sobre-señalización lleva a que deje de percibirse la señal repetida y el cerebro tienda a obviarla.
En mi opinión los semáforos deberían limitarse a los cruces donde deba pararse el tráfico de forma alternativa o en aquellos puntos donde quiera aumentarse la atención del conductor, bien para que ceda el paso a los peatones, o bien para indicar algún riesgo fuera de lo común.
En Salamanca, nos hemos acostumbrado a que, cuando vamos conduciendo un coche y llegamos a un semáforo intermitente tenemos que mirar qué se indica a los peatones:
- si está en verde para ellos o no tiene señal alguna hay que parar
- si la señal de los peatones está en rojo hay que seguir.
La gente que viene de fuera se vuelve loca con esta señalización confusa y contradictoria. Paran, en todos los casos, con buen criterio, y quienes van detrás les tocan el claxon para que continúen circulando.
El Reglamento General de Circulación (Art. 146, d) dice que una luz amarilla intermitente obliga a los conductores a extremar la precaución y, en su caso, a ceder el paso, lo cual significa que el conductor del vehículo debe parar en todos los casos. En otras palabras, con estos semáforos la prioridad es siempre para los peatones.
Deberían eliminarse o corregirse todos los semáforos intermitentes que intenten transmitir otros mensajes, y los hay a decenas en Salamanca. Ejemplo: a la salida de la rotonda situada en el cruce de la Avda Portugal con Paseo de la Estación. Los pasos de peatones en dirección de salida de la rotonda (cuando están intermitente para vehículos y verde para peatones) son peligrosísimos para los peatones. Caso contrario: Las rotondas situadas en la Avda de Salamanca (Carrefour, Ctra. de Toro o de Valladolid).
Por otra parte, un semáforo intermitente en la entrada de una rotonda tiene el mismo efecto que una señal de ceda el paso (cuando todo el mundo haya interiorizado que quienes circulan por las rotondas tienen prioridad, con pintar un triángulo de peligro en el suelo sería suficiente). Tanto semáforo que sólo indica precaución es contraproducente, porque la sobre-señalización lleva a que deje de percibirse la señal repetida y el cerebro tienda a obviarla.
En mi opinión los semáforos deberían limitarse a los cruces donde deba pararse el tráfico de forma alternativa o en aquellos puntos donde quiera aumentarse la atención del conductor, bien para que ceda el paso a los peatones, o bien para indicar algún riesgo fuera de lo común.
Ocurre en muchos otros lugares, yo le he visto en Albacete, Toledo, Madrid, Talavera de la Reina.
ResponderEliminarPienso que son las empresas instaladoras, que no se enteran.
Técnicamente es un disparate. Un amarillo intermitente es una simple llamada de atención, ni da ni quita preferencia. En el supuesto descrito habría que ceder el paso a los peatones en cualquier caso ya que la marca vial les otorga preferencia.
Soy profesor de formación vial.
Muchas gracias por tu comentario, con el que coincido completamente.
EliminarOcurre en muchos otros lugares, yo le he visto en Albacete, Toledo, Madrid, Talavera de la Reina.
ResponderEliminarPienso que son las empresas instaladoras, que no se enteran.
Técnicamente es un disparate. Un amarillo intermitente es una simple llamada de atención, ni da ni quita preferencia. En el supuesto descrito habría que ceder el paso a los peatones en cualquier caso ya que la marca vial les otorga preferencia.
Soy profesor de formación vial.